Divinas palabras: Tragicomedia de aldea

En Divinas palabras culmina Ramón del Valle-Inclán un proceso de creación dramática que había iniciado con las Comedias bárbaras. Su conocimiento de las corrientes predominantes en el teatro europeo le lleva a proponer a la escena española unas obras que entonces resultaban excesivamente renovadoras y que hoy son unánimemente consideradas como cumbres del teatro español de nuestro siglo. Pero Divinas palabras, en particular, va más allá todavía de lo que en Europa podría imaginar el “teatro del absurdo”. Don Ramón pone en pie un universo cuyos personajes enlazan con los de la tragedia clásica y sun como ellos movidos por las más fieras y desnudas pasiones: la lujuria, la avaricia. Pero, al mismo tiempo, una fuerza irracional de piedad cruza la escena y envuelve a quienes en ella se mueven a impulsos de la animalidad humana.

Luis Iglesias Feijoo, catedrático de Literatura Española de la Universidad de Santiago de Compostela, ha reconstruido todo el proceso de la escritura y clarifica en numerosas anotaciones lugares oscuros, expresiones preñadas de contenidos ocultos, contemplándolo todo inscrito en el orbe valleinclanesco y proyectándolo en la introducción sobre el contexto europeo.

Clásicos Castellanos #26